Lo que toca la mirada
en la colección MUNTREF
Del 8 de mayo al 20 de diciembre
Curaduría: Diana Wechsler
Imágen: César Ibarra Jiménez, Holobiontes VIII, 2021
Esta exposición reúne una selección de obras de la colección MUNTREF, algunas piezas del archivo y otras de los fondos bibliográficos como una invitación a descubrir en la variedad de objetos, soportes y materialidades la singularidad de cada uno, sus interacciones y su capacidad evocadora.
Colecciones, archivos, bibliotecas se presentan como un conjunto “ordenado” destinado a retener tiempos y horizontes diversos. Son repertorios a los que se les asigna un valor y se conservan con la certeza de que alojan sentidos variados y, en su combinatoria, contribuyen al desarrollo de numerosas narrativas, quizás tantas como las de los sujetos que se acerquen a indagarlos.
La acción curatorial establece preguntas, lee, estudia, selecciona qué y porqué exhibir determinadas piezas, ensaya diálogos entre ellas con los que contribuirá en la construcción del relato, uno entre los muchos posibles.
Sabemos con Walter Benjamin que toda imagen tiene más de pasado y de porvenir que el sujeto que la mira. En las colecciones, nos encontramos con lo visible de otras épocas y esto nos acompaña. En palabras de John Berger, esto hace que nos sintamos menos solos frente a aquello que nosotros mismos vemos aparecer y desaparecer todos los días.
Mirar la colección del MUNTREF, abre perspectivas que superan incluso el o los objetos sobre los que se reflexiona, entre otras, la infinidad de formas que asumen los pasados y la innumerable cantidad de voces y relatos que ellas pueden despertar. Esta afirmación de lo visible remite a la ilusión de repertorio infinito, está allí a la espera de una mirada que los toque —singular y subjetiva siempre— para cobrar vida y empezar a hablar con su propia voz en la lengua del otro.
Diana Wechsler