Una mirada crítica sobre la relación entre arte y tecnología
El Laboratorio Geopoéticas Subalternas es un espacio en el que conviven proyectos de investigación elaborados por artistas mujeres.
03-05-2019
En los últimos años la tecnología les ha ofrecido nuevas herramientas de expresión a los artistas, y al mismo tiempo cada vez son más los artistas que empujan los límites del arte mirando más allá de lo que se podría considerar tradicional al incorporar otros aspectos en su trabajo. Con la ayuda de la tecnología, cada vez más personas se animan a producir obras, lo que hace que aumenten a su vez las críticas de aquellos que sostienen que la existencia de nuevas herramientas y técnicas genera la pérdida de sentido y de la habilidad para evaluar qué es arte y qué no lo es. En el marco del Laboratorio de Arte Electrónico e Inteligencia Artificial (LAEIA) de la UNTREF, 14 artistas mujeres organizaron el Laboratorio Geopoéticas Subalternas, espacio en el que se congregan para promover proyectos de investigación postulando una mirada crítica sobre la relación entre arte y tecnología.
“Este laboratorio es una conjunción de diferentes proyectos de investigación que llevan a cabo investigadoras, docentes y estudiantes de la Maestría en Tecnología y Estética de las Artes Electrónicas. Observamos críticamente esta relación entre arte y tecnología y tenemos una mirada que se ejecuta desde una perspectiva de género y a través de nuestras prácticas específicas que se vinculan con la biotecnología, el arte público, la robótica y las diferentes manifestaciones en las que se ponen en juego los cruces de prácticas artísticas con prácticas tecnológicas”, explicó Mariela Yeregui, directora de la Maestría y coordinadora de este espacio-laboratorio junto a Gabriela Munguía.
Los trabajos e investigaciones realizados por los miembros de este laboratorio tienen un espacio permanente de exposición en la Casona de los Olivera (Chacra de los Remedios, Parque Avellaneda). Allí, hasta el día de hoy se llevaron a cabo dos encuentros: el primero consistió en una acción participativa titulada El silencio grita organizada en el marco del Día Internacional de la Mujer, en la cual Piren Benavidez Ortiz trabajó conjuntamente con la Asamblea de Vecinos en Alerta para visibilizar la problemática de la violencia de género en Argentina y Latinoamérica; y el segundo, una muestra de Claudia Valente y Guadalupe Chávez titulada ¿Cuándo fue la última vez que conversaste con una flor?, que se podrá ver hasta el 26 de mayo. El proyecto, basado en una investigación de la inteligencia de las flores silvestres para descubrir patrones de conducta que auxilien a los humanos excluidos de las zonas de privilegio en el sistema capitalista, se materializa en una colección de libros de artista, como nodo central, e instalaciones electrónicas basadas en algunas de las flores estudiadas, como nodo periférico.
Con el objetivo de involucrar al público en la muestra, las artistas invitan el domingo 5 de mayo a las 14:30 horas a una caminata por la Huerta Comunitaria del Parque Avellaneda para realizar un ejercicio de sensibilización mediante el reconocimiento y relevamiento de la flora del lugar. Posteriormente tendrá lugar un taller en el que se tomarán imágenes microscópicas de los vegetales recolectados y se hará una construcción de flores en origami que serán el soporte para la escritura y registro de la experiencia.
Integran el Laboratorio de Geopoéticas Subalternas las artistas Laura Nieves, María Laura Vázquez, Paula Guersenzvaig, Ana Laura Cantera, Marlin Velasco, Laura Palavecino, Piren Benavidez Ortiz, Paloma Márquez, Mariana Lombard, Mariana Corral y Guadalupe Chávez, “todas ellas capaces de consolidar un ámbito abierto al diálogo y la discusión en torno a la biopolítica y geopoéticas de los territorios”, afirmó Yeregui.
Ella explicó que las artistas comparten como punto en común el estudio y el mapeo de los territorios circundantes, fronterizos, biológicos, periféricos y simbólicos que habitamos. Asimismo, hizo referencia a lo importante que resulta el hecho de poseer perspectiva de género en esta temática: “Nos venimos reuniendo desde el año pasado, ya que observamos que tenemos miradas en común sobre la práctica tecnológica y su relación con el arte. Además, consideramos que el fenómeno del entrecruzamiento entre arte y tecnología tiene una tradición muy arraigada en cierta ideología patriarcal, por lo que nosotras tratamos de desarmar esta situación desde nuestra mirada mediante estrategias y perspectivas que apunten a la equidad de género”, agregó.
En paralelo a los proyectos de investigación se realizan en este laboratorio dos seminarios abiertos a la comunidad: el Seminario Mapa e-Textil, que hace hincapié en la integración de la electrónica textil como herramienta y metodología aplicable para el desarrollo de mapas conceptuales en donde los estudiantes pueden confeccionar piezas manuales o tecnológicas; y el Seminario de Fronteras Invisibles, que propone activar en el alumno su sensibilidad hacia el entorno e imaginar nuevas y posibles ecologías, entendiendo que este puede ser contexto y materia prima de su obra y un desafío para poner en práctica los conocimientos adquiridos hasta el momento.
La UNTREF, a través de la Maestría en Tecnología y Estética de las Artes Electrónicas, busca la articulación de múltiples saberes y herramientas de disciplinas diversas con el objetivo de construir interfaces, dispositivos y entornos que reformulen y recontextualicen el estatuto del arte en el marco de los lenguajes tecnológicos. Su propuesta final es trascender la visión arte-tecnología como una simple transferencia de herramientas y generar un campo que atienda lo específico de esta relación.