En el apogeo del Premio Braque en 1966, en plena ebullición de las vanguardias de entonces, Samuel Oliver, director del Museo Nacional de Bellas Artes, exultaba de ver a los jóvenes creadores presentar sus obras en el Pabellón del Museo.[1] Marcado por la alegría y la investigación de los jóvenes artistas, el Braque de los años sesenta acompañaba las vanguardias y anclaba su reconocimiento en esta etapa fundacional que coincidió con una vitalidad particular del arte argentino (Giunta, 2008). Entre 1963 y 1997, esta institución fuera de lo común, sostenida por la Embajada de Francia en la Argentina, mantuvo a largo plazo atracción y prestigio a pesar de las dificultades de las épocas que atravesó. Una de estas fue el controvertido Premio 1968, en el que se cristalizaron los enfrentamientos entre las vanguardias más politizadas y las instituciones. El Braque no resistió a esta crisis, y su primera etapa se terminó con la edición 1969. Volvió a renacer en el 1979 hasta su ultima edición en 1997.
Esta exposición retrospectiva del Premio Braque, que recorre toda su trayectoria, se sustenta en un profundo trabajo de investigación y afirma así la importancia de una curaduría crítica y de investigación.[2] El Braque resalta como un espacio institucionalizado en el que se juegan las acciones y los deseos de sus organizadores, del jurado, de los artistas y de la crítica. Sin embargo, lo central en esta institución es lo que produce: un corpus inmenso de obras que abarca el Premio en las muestras anuales en Buenos Aires y las realizadas durante las estadías en París. A un enfoque social, sumamos una perspectiva warburgiana que pone el foco en las imágenes y permite ordenar, gracias a un método de “conocimiento por montaje” (Didi-Huberman, 2009: 129), un corpus que fue producido durante 35 años en la Argentina y Francia.
El Premio Braque fue un espacio y una institución clave para los jóvenes artistas argentinos, sirvió como un espacio de experimentación, de presentación en la escena artística y de formación profesional. Construyó su prestigio en la época de su creación y en el largo plazo integrando lo “joven” en una visión amplia y abarcadora de poéticas y lenguajes muy variados. Porque supo integrar una variedad de estilos, movimientos y escuelas, el Braque pudo atravesar estos años de la historia argentina.
En este eclecticismo surgen tendencias, dinámicas y resistencias que nuestra mirada organizó en ejes conceptuales transversales y no cronológicos. Por un lado, en el Braque existe un compromiso con el arte joven y vanguardista, los artistas más en boga tuvieron allí una fuerte presencia. Por otro lado, el Premio se caracterizó por su gran apertura hacia expresiones artísticas y lenguajes variados, algunos con características propiamente locales. Incorporó a artistas de todo el país con sus poéticas singulares, artistas a veces ignotos y que permiten contemplar otros relatos históricos. En el Braque se jugó una tensión entre lo experimental y expresiones enraizadas en rasgos autóctonos y cuyas búsquedas se desentienden de los cánones internacionales. En algunas de sus etapas, el Braque se orientó hacía imágenes más conservadoras so capa de conservar su espacio en el escenario porteño.
Concebida como una travesía a lo largo de la historia del Premio, la exposición, que reúne obras de juventud de cuarenta creadores, pone a la luz el espíritu que lo guio, las tensiones que lo atravesaron y su impacto en las trayectorias de los artistas y en la historia del arte argentino.
Lucie Haguenauer
[1] “El Premio Braque es un premio a la juventud, a los que tienen espíritu joven, a los que hacen del acto creador un acto de fe, a los que crean con alegría y originalidad” (Catálogo Premio Braque, 1966).
[1] La exposición es el resultado de la investigación realizada para la tesis de Maestría en Curaduría en Artes Visuales de la Universidad Nacional de Tres de Febrero defendida en noviembre de 2015 bajo la dirección de Diana B. Wechsler. No incluye la tercera etapa del Premio Braque, iniciada por la UNTREF en 2013.
La historia del Premio Braque resume por sí sola la evolución de la larga cooperación cultural entre Francia y la Argentina.
Un intercambio de personas, ideas, experiencias y prácticas artísticas que enriquece y amplía los horizontes de muchos artistas de ambos países. Una cooperación sólida, basada en eventos concretos, que profundiza los lazos existentes y prefigura lo que serán mañana.
En homenaje a Georges Braque, figura emblemática de la Escuela de París, el Premio toma su nombre para simbolizar lo que hoy es el proyecto de mayor duración llevado adelante por la Embajada de Francia en el campo de las artes visuales. Con cuatro décadas de trayectoria, el Premio Braque atraviesa nuestra historia contemporánea y la vida de miles de artistas y actores de la escena cultural de la Argentina y Francia. Concebido en 1963 por la Embajada de Francia en la Argentina, que confió en la vitalidad del arte argentino, el Braque fue rápidamente reconocido como una institución del mayor prestigio. Desde sus inicios hasta 1997, pasó por contextos de gran dificultad política, social y económica, pero, como prueba de su importancia y trascendencia, los actores culturales sostuvieron su organización.
Los números son contundentes. Entre 1963 y 1997, más de 5000 artistas se presentaron al Premio Braque, más de 800 fueron seleccionados y expuestos en las veinticuatro exposiciones. Cuarenta y uno de estos artistas recibieron la mayor distinción y pudieron realizar una residencia artística en París.
Nuestra historia hubiera quedado en el olvido o, quizás, hubiese sido idealizada sin el sólido trabajo de investigación realizado por Lucie Haguenauer, del Institut Français d’Argentine, en el marco de su tesis de Maestría en Curaduría en Artes Visuales de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF). Agradezco su compromiso para poner en valor la acción cultural de Francia en la Argentina; esta exposición y su catálogo le otorgan una nueva vida.
Esta exposición retrospectiva, inaugurada en paralelo con la edición de 2017 del Premio Braque, relanzado con la Universidad Nacional de Tres de Febrero hace cuatro años, es una excelente manera de celebrar esta historia y establecer las bases de los lazos del futuro.
Agradezco a la UNTREF, especialmente a su rector, Aníbal Jozami, y a todo su equipo, por su labor en la organización de esta exposición y por el reconocimiento de nuestra acción cotidiana a favor del diálogo y la difusión de las artes y la cultura.
Pierre Henri Guignard
Embajador de Francia en la Argentina
Carlos Alonso
Quiero vivir, 1965
Tinta sobre papel, 50 x 70 cm
Jacques Bedel
Alter Ego, 1969-2005
Acrílico y espejo, 150 x 75 cm
Luis Benedit
El pájaro neumático, 1963
Óleo sobre tela, 93 x 93 cm
Colección particular
Con esta obra el artista participó del Premio Braque 1965.
Nelson Blanco
Sin título, 1963
Óleo sobre tela, 60 x 80 cm
Colección Galería Rubbers
Dino Bruzzone
Pont Neuf, 1996
Fotografía, 160 x 120 cm
Dino Bruzzone
Quai aux fleurs, 1996
Fotografía, 120 x 100 cm
Dino Bruzzone
Quai d’Orléans, 1996
Fotografía, 135 x 100 cm
Delia Cancela y Pablo Mesejean
Chica, lunares y estrellas, 1967
Técnica mixta sobre papel, 35 x 23 cm
Colección Delia Cancela
Delia Cancela y Pablo Mesejean
Chica pelirroja con tapado azul y zapatos fucsias, 1967
Técnica mixta sobre papel, 33,5 x 21,5 cm
Colección Delia Cancela
Delia Cancela y Pablo Mesejean
Chica pelo negro con camisa de estrellas, 1967
Técnica mixta sobre papel, 34,3 x 22,5 cm
Colección Delia Cancela
Delia Cancela y Pablo Mesejean
Chicas floridas, 1967
Técnica mixta sobre papel, 36 x 28 cm
Colección Delia Cancela
Delia Cancela y Pablo Mesejean
Chica y corazones, 1967
Técnica mixta sobre papel, 35,5 x 23 cm
Colección Delia Cancela
Delia Cancela y Pablo Mesejean
Chica y rayas, 1967
Técnica mixta sobre papel, 32 x 25 cm
Colección Delia Cancela
Delia Cancela y Pablo Mesejean
The Blue Girl, 1967
Técnica mixta sobre papel, 32 x 25 cm
Colección Delia Cancela
Delia Cancela y Pablo Mesejean
Rita Tushingham y nube, 1966
Acrílico sobre tela y hardboard, 200 x 160 cm
Colección CAC – Museo Provincial de Bellas Artes Emilio Caraffa, Córdoba
Daniel Capardi
Laberinto de piedra, 1983-2017
Piedra reconstituida, 300 cm
Primer premio de escultura, 1983.
Jorge Carballa
Juegos de sombra, 1968
Instalación de tules
Segundo premio de pintura, 1968.
Carmelo Carrá,
La révolution de Mai 1968, 1968-1971
Acrílico sobre tela, 185 x 130 cm
Colección Guillermo González Taboada
Roberto Elía
Texto ígneo, 1975-1976
Escritura con fuego, 60 x 32 cm
Roberto Elía
Sin título, 1985
Estampado a fuego, oleo, grafito y cloro sobre tinta, 41 x 51 cm
Leandro Erlich
80x80x180 o Ascensor, 1995
Estructura metálica, madera, fórmica, espejo, 190 x 80 x 80 cm
Colección particular
Mención especial de objetos, 1995.
Nicolás García Uriburu
Ranas, frutas y pájaros, 1965
Dibujo, 70 x 50 cm
Colección particular
Segundo premio de dibujo, 1965.
Nicolás García Uriburu
Las tres gracias, 1967
Óleo sobre tela, 200 x 180 cm
Colección Museo Nacional de Bellas Artes
Eduardo Giusiano y Jorge Schneider
Generador de imágenes, 1968
Madera, espejos, lentes, metal, acetato, lámparas, motor, 73,5 x 80 x 35 cm
Colección Museo Nacional de Bellas Artes
Tercera mención de pintura, 1968.
Fernando X. González
Estudio para el retrato de Santiago Espinoza 1, 1981
Acrílico sobre tela, 150 x 100 cm
Dibujo, 20 x 30 cm (anverso y reverso)
Colección del artista
Primer premio de pintura, 1982.
Fernando X. González
Estudio para el retrato de Santiago Espinoza 2, 1981
Acrílico sobre tela, 150 x 100 cm
Dibujo, 20 x 30 cm
Colección del artista
Primer premio de pintura, 1982.
Sebastián Gordin
Piscina de la calle Pontoise, 1996
Construcción dentro de caja, vista a través de una mirilla, 45 x 100 x 60 cm
Colección particular
Miguel Harte
El gordiespacio sideral, 1994
Semiesfera de acrílico, pintura texturada, espejos, vidrios, vaselina, luz, movimiento, 80 cm diámetro x 45 cm
Colección Franco Bronzini
Nora Iniesta
Ejercicios cotidianos, 1980
Papel collage, 23,5 x 31 cm
Colección de la artista
Nora Iniesta
Ejercicios cotidianos, 1980
Papel collage, 36 x 51 cm
Colección de la artista
Nora Iniesta
Haciendo cuentas, 1981
Papel collage, 16,5 x 24,5
Colección de la artista
Nora Iniesta
Libro abierto I, 1980
Papel collage, intervenciones sobre páginas de libros infantiles, 16 x 14,5 cm
Colección de la artista
Nora Iniesta
Libro abierto II, 1980
Papel collage, intervenciones sobre páginas de libros infantiles, 16 x 14,5 cm
Colección de la artista
Nora Iniesta
Libro abierto III, 1980
Papel collage, intervenciones sobre páginas de libros infantiles, 16 x 14,5 cm
Colección de la artista
Gustavo Alfredo Larsen
Ronda alrededor del mundo, 1982
Grabado, 72 x 51 cm
Primera mención de grabado, 1985.
Lux Lindner
Les dernières nouvelles d’Alsace, 1998
Tinta sobre papel, 15 x 21 cm
Jorge Luna Ercilla
Rovira in Black and White, 1967
Xilografía s/ papel (4/10), 72 x 102 cm
Colección Patrimonial Museo Provincial Emilio Pettoruti
Jorge Macchi
Platz, 1993
Objeto. Madera pintada y metal, 300 x 30 x 30 cm (extendido)
Primer premio de escultura, 1993.
Eduardo Medici
Sin titulo. De la serie Saco y corbata, 1981
Acrílico sobre madera, 120 x 80 cm
Colección del artista
En 1982 participó en el premio de pintura con la serie Saco y Corbata.
Gabriel Messil
Desarrollo, 1967
Madera, chapadur y pintura acrílica, 223 cm x 153 cm x 82 cm
Colección Patrimonial Museo Provincial Emilio Pettoruti
Primer premio de pintura, 1967.
Honorio Morales
Guarismo Astral, 1965
Óleo sobre tela, 153,5 x 153,5 cm
Colección particular
Segundo premio de pintura, 1965.
Daniel Ontiveros
Vanguardia y tradición, 1994
Acrílico sobre tela, 180 x 180 cm
Colección del artista
Con esta obra el artista participó del premio de pintura de 1994.
Marie Orensanz
Sin título, 1968
Cinta negra adhesiva sobre plancha de acrílico transparente, 178,5 x 119 cm
Colección de la artista
Segunda mención de dibujo, 1968.
Pablo Páez
FRIC-FRAC, 1993
Impresión glicée, 150 x 200 cm
Jorge Pietra
Serie: Recuerdos de Colegiales III, 1983
Acrílico sobre papel, 120 x 150 cm
Jorge Pietra
Serie: Recuerdos de Colegiales IV, 1983
Acrílico sobre papel, 120 x 150 cm
Felipe Pino
Chaqueta, 1979
Óleo sobre tela, 140 x 90 cm
Colección Marcelo Céspedes
Primer premio de pintura, 1979.
Víctor Hugo Quiroga
La triste historia de Pedrito Hallao y de cómo se hizo milagrero, 1984
Óleo sobre tela, 200 x 160 cm
Colección del artista
Premio de pintura, 1986.
Emilio Renart
Sin título, 1964
Tinta sobre papel, 102 x 75 cm
Colección Débora Frydman
Primer premio de dibujo, 1965.
Osvaldo Romberg
Proyección vertical de un hombre solo o Figura seriada n°1, 1967
Acrílico, 179 x 59,8 x 33 cm
Colección Pedro Roth
Segunda mención de grabado, 1967.
Mabel Rubli
Diurno 5, 1963
Aguafuerte, aguatinta, 28 x 50 cm
Colección de la artista
Primer premio de grabado, 1964.
Mabel Rubli
Nocturno 5, 1963
Aguafuerte, aguatinta, 27 x 50 cm
Colección de la artista
Primer premio de grabado, 1964.
Roberto Scafidi
Reunión, 1989-1991
Acrílico, óleo y collage sobre tela, 100 x 110 cm
Colección del artista
Premio de pintura, 1991.
Daniel Scheimberg
Sin título, 1984
Aerógrafo y acrílico sobre tela, 90 x 80 cm
Betina Sor
La gatera, 1993
Poliestireno expandido de alta densidad, maderas, chapas, tierra, 80 x 130 x 140 cm
Colección de la artista
Primera mención de escultura, 1993.
Hugo Soubielle
Las primeras entradas por la ventana, 1968
Óleo sobre tela, 160 x 160 cm
Colección MACLA
Primera mención de pintura, 1968.
Estela Zariquiegui
Radiografía de un ciudadano. Tres estampas, 1980
Aguafuerte, aguatinta, collage, 29 x 24,5 cm / 23,5 x 21, 5 cm / 29 x 24,5 cm
Segunda mención de grabado, 1981.