Se presenta la primera Diplomatura en Géneros, Sexualidades y Vejeces del país
Está dirigida a profesionales del ámbito gerontológico que busquen incorporar nuevas herramientas para el desarrollo de propuestas de Educación Sexual Integral en personas mayores.
20-08-2021
La UNTREF presenta su nueva Diplomatura Superior en Géneros, Sexualidades y Vejeces, una propuesta totalmente pionera en Argentina que busca capacitar a profesionales del ámbito gerontológico para el desarrollo de propuestas de Educación Sexual Integral (ESI) en personas mayores y la trasnversalización del género en el campo de la edad.
“Estamos abriendo una puerta que antes no existía”, aseguró Mónica Navarro, directora de la flamante formación de posgrado. Para ella, este tipo de formación tiene que ver con poder pensar hacia adelante. “Debemos pensar en un futuro con vejeces diversas: personas no binarias, trans y todas las identidades que se vayan visibilizando, las cuales se requerirá reconocer e incluir en las políticas públicas y en todo el campo gerontológico”, ilustró.
Navarro planteó la importancia que tiene la ESI en las mujeres mayores. “Una podría preguntarse para qué sirve si ya tuvieron una vida sexual anterior, con hijos y una pareja, donde ahora ya no van ser madres ni decidir sobre su propio cuerpo. Pero se trata de restaurarles el derecho a saber sobre géneros y sexualidades que no tuvieron antes. Estamos abriendo un capítulo para pensar los derechos sexuales de las mujeres más allá de la reproducción e incluir la diversidad”, graficó.
Navarro también enfatizó que la propuesta rompe con los estereotipos sobre la vejez y que por eso corresponde hablar de vejeces, es decir de múltiples identidades en esa etapa de la vida. “Buscamos revertir esa visión única que dice que las personas mayores son asexuadas y son todas iguales, que no hay diversidades sexuales en la vejez. Queremos enriquecer esa mirada y ser más acordes a la realidad que es múltiple”, remarcó.
La directora de la Diplomatura apuntó que la obturación de este derecho se ve muy claramente en los geriátricos. “Las personas institucionalizadas representan un 2 % de la población de personas mayores, y hay una especie de conspiración para evitar que la sexualidad entre en esos espacios. Vemos que este derecho está restringido, lo que no significa que esté restringido el deseo”, explicó.
Precisamente sobre los derechos sexuales reproductivos y no reproductivos se explayó una de las docentes de la Diplomatura, Josefina Brown. “Cuando esto se traduce en políticas públicas se enfoca en general en una categoría que abarca la edad reproductiva de las mujeres que se considera entre los 15 y 49 años”, describió, agregando que esas políticas abarcan aspectos como la procreación, la maternidad, la fertilización asistida, el aborto, la anticoncepción y la prevención de enfermedades de transmisión sexual.
“Cuando se pasa ese umbral de edad, las personas comienzan a considerarse no sexuales, y si además dejan de participar en el mercado de trabajo quedan aún más fuera de la ciudadanía”, consideró. Según ella, lo interesante de la Diplomatura es que permite repensar esos derechos. “Las personas somos seres sexuales porque poseemos un cuerpo que puede estar sexuado de muchas maneras, podemos ser varones, mujeres, cis o trans, heterosexuales o no heterosexuales sin que importe nuestra edad”, afirmó, y dijo que es clave “tener acceso a todos los recursos e información disponibles para poder ejercer nuestro derecho de la mejor manera posible”.
Por su parte, la subsecretaria de Inclusión Educativa del Ministerio de Educación de la Nación, Graciela Morgade, subrayó que Navarro y su equipo “han venido mostrando y denunciando el edadismo, el pensar a las personas mayores como sujetos sin sexualidad, sin capacidad de aprender e inferiorizados”, y acotó que “el desarrollo histórico en la actualidad está mostrando otra cosa”.
Morgade, quien fue una de las redactoras de los lineamientos curriculares de la ESI, expresó que el enfoque que plantea esa ley es el más apropiado para pensar en la educación sexual de las personas mayores. “La ESI tuvo que luchar contra un estereotipo que era el de la educación sexual biomédica, que pensaba la educación sexual como la enseñanza de métodos anticonceptivos y la prevención contra infecciones de transmisión genital, y eso estaba pensado en sujetos que tenían una actividad sexual genital muy activa, fundamentalmente adolescentes”, rememoró.
En ese sentido, refirió que la ESI contempla que “toda la vida de los sujetos está compuesta de una dimensión sexual, desde el nacimiento hasta la muerte”, y que por eso las personas mayores deben ser alcanzadas por ella. Asimismo, se refirió a otro de los conceptos fuertes que recorre la carrera, que es el de la educación a lo largo de la vida. “En el caso de las personas mayores es procurar sacarlas de un estadio seudoinfantil en que muchas veces se las pone, en el sentido de tutelarlas. Pensar en la educación a lo largo de la vida es pensar en su derecho y en que tienen potencia y posibilidades de seguir educándose”, declaró.
Por otro lado, destacó que la Diplomatura intenta salir del discurso hegemónico de la gerontología. “La gerontología ha tenido un sesgo patriarcal que no ha visibilizado la absoluta necesidad de que el trabajo con personas mayores tenga una perspectiva feminista, no solamente porque las personas mayores son por el momento fundamentalmente mujeres, sino porque muchas de ellas vivieron una vida en un contexto patriarcal y heteronormativo en el cual muchas de sus posibilidades fueron censuradas”, definió.
Morgade dijo estar entusiasmada con el lanzamiento de la Diplomatura y lo que se abre con ella. “Lo que necesitamos es acumular conocimiento. La potencia de las universidades cuando arman posgrados es que las personas que los cursan van a producir conocimiento con sus trabajos. Es un semillero para futuras investigaciones y un inventario del estado de situación, por eso es tan importante la creación de esta diplomatura”, concluyó.
Esta previsto que la carrera se inicie en abril del 2022. Su cursada será online y su duración, de un año. Además de clases teóricas, ofrecerá talleres en los que se presentarán intervenciones comunitarias y experiencias en diversos espacios como el Programa Ancestras de la UNTREF y la Fundación Huésped.
Los expertos que integran su cuerpo docente provienen de diferentes disciplinas. Los contenidos que aborda la Diplomatura son: epistemologías de género y construcción social del género y la edad; salud sexual y sexualidad en personas mayores; disidencias, sexualidades no binarias y vejeces no pensadas; intervenciones educativas y abordajes territoriales en sexualidades y vejeces; pedagogías y abordajes territoriales de la Educación Sexual Integral; y derechos (no) reproductivos y sexuales, discriminación y violencias, y violencia de género en la vejez. Para más información contactarse a generosyvejeces@untref.edu.ar.