Más de 16 mil niños y niñas de entre 3 y 17 años fueron vacunados en las sedes de la UNTREF
Mientras que en la Sede Lynch se aplicaron 10106 dosis, en Caseros II 6012 menores recibieron la vacuna contra la covid-19.
22-10-2021
La vacunación contra la covid-19 no se detiene en las instalaciones de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF). A dos semanas de iniciada la inoculación para niños y niñas de entre 3 y 17 años, se registra al momento un total de 16118 dosis aplicadas en los vacunatorios que funcionan en las sedes Lynch y Caseros II. Además, desde el inicio de la campaña en el mes de marzo, se aplicaron 214439 vacunas a hombres y mujeres mayores de 18 años.
Cuando la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó la aplicación de vacunas contra la covid-19 en menores de 3 a 17 años, la lucha contra la pandemia ingresó a una nueva etapa en la Argentina. El 2 de octubre la provincia de Buenos Aires se convirtió en el primer territorio nacional en iniciar la inscripción a niños y niñas comprendidos en esa franja etaria, para pocos días después comenzar la aplicación de las dosis correspondientes.
A partir de ese momento los vacunatorios de la Universidad se abocaron, casi con exclusividad, a la aplicación de vacunas en menores: "Desde el 12 de octubre, cuando comenzó oficialmente la vacunación para este universo de la población, estamos aplicando un promedio de 1200 dosis diarias", comentó una de las coordinadoras del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, Constanza Danús, quien agregó que todos los voluntarios y administrativos que se desempeñan en las sedes de la Universidad están capacitándose en forma permanente "para brindar el mejor servicio y ofrecer la mejor información a los vecinos".
Por su parte, el docente de la Especialización en Educación y Promoción de la Salud e integrante del Departamento de Salud y Seguridad Social, Rodolfo Kaufmann, aseguró que la importancia en la vacunación a menores tiene que ver con la reducción de la circulación viral. Asimismo, el especialista en Salud Pública recordó que "lamentablemente hubo casos de complicaciones en niños, y en todo el mundo se registraron fallecimientos, por lo que resulta fundamental que puedan vacunarse".
Romina Iuzzolino y Romina Piazza trabajan en la Universidad desde hace más de 15 años. Las dos integran la nómina de nodocentes y desarrollan sus actividades en la Secretaría de Extensión Universitaria y Bienestar Estudiantil. Cuando llegó el turno de anotar a sus hijos e hijas lo hicieron inmediatamente.
"Decidí vacunar a Valentina, de 11 años, y a Catalina, de 6, porque considero que de esta forma se reduce la circulación del virus y principalmente porque una de las nenas tiene problemas respiratorios", comentó Piazza.
A su vez, detalló que una de sus hijas se vacunó en la Sede Lynch y la otra lo hizo en el Centro Cultural Ítalo-Argentino Dante Alighieri, de Caseros. "Las dos estaban muy contentas y querían vacunarse. En casa les explicamos las ventajas de hacerlo, pero creo que influyó mucho el hecho de que casi todas sus compañeras de escuela también se vacunaron", indicó.
Por su parte, Iuzzolino, su marido Javier y sus hijos Joaquín, de 10 años, y Ramiro, de 5, tuvieron covid-19 a principios de este año. Tanto Romina como Javier padecieron síntomas fuertes de fiebre, dolor de cabeza y malestar corporal, y aunque los chicos transitaron la enfermedad sin complicaciones, la nodocente destacó que "es fundamental que todos estemos vacunados para erradicar la pandemia".
"Me considero provacunas y nunca tuve dudas sobre este tema, pero de todas formas hablé con el pediatra y seguí sus recomendaciones sobre la vacunación a menores. Ahora estoy más tranquila porque sé que si se contagian los efectos negativos van a ser mínimos", destacó, y comentó que sus hijos estaban contentos por conocer la Sede Lynch y "por tomarse fotos con el carnet en la mano".
La vacuna de Sinopharm que se aplica a los niños y niñas de entre 3 y 11 años fue desarrollada por la Corporación Grupo Farmacéutico Nacional Chino (conocida como Sinopharm) en colaboración con el Beijing Institute of Biological Products. Utiliza el virus inactivado, una tecnología similar a otras que se aplican a los menores desde hace mucho tiempo, como la vacuna contra la poliomielitis o contra la hepatitis A. Según los resultados del ensayo clínico de Fase I y II, publicados en la revista médica The Lancet, la vacuna demostró ser “segura y bien tolerada” en los menores de esta edad.
Con la autorización de la Argentina, son 4 en total los países del mundo que aprobaron el uso de la vacuna de Sinopharm en niños. El 20 de julio último fue China, Emiratos Árabes Unidos el 2 de agosto, y en El Salvador la vacunación se inició el 22 de septiembre, pero entre quienes tienen de 6 a 17 años.
Para inscribir a los niños y niñas hay que ingresar en la web https://vacunatepba.gba.gob.ar/ o a través de la aplicación Vacunate PBA. Los menores deberán contar con el consentimiento de sus padres o responsables afectivos para recibir la dosis; por ese motivo, al momento del registro, tendrán que descargar una autorización para entregar el día del turno.