Los desafíos para la Argentina en un nuevo escenario económico internacional
Especialistas en economía analizaron las oportunidades de desarrollo e inserción que tiene nuestro país en un panorama mundial renovado tras la pandemia.
23-07-2024
Ricardo Carciofi, Juan Carlos Hallak, Andrés López y Matías Kulfas, los expertos en economía convocados al Seminario de Pensamiento Económico Argentino, destacaron que la Argentina, para crecer económicamente y lograr un desarrollo productivo sostenido, debe revitalizar la agenda externa e interna con el Mercosur; redefinir sus alianzas con los países asiáticos, principalmente con China; e insertarse en mercados internacionales, teniendo en cuenta nuevas políticas industriales que contemplen la llamada “energía verde” y la innovación y digitalización productiva.
Los investigadores Carciofi y Hallak de la Universidad de Buenos Aires (UBA) observaron dos escenarios diferenciados. Mientras Carciofi advirtió una fragmentación económica signada por factores geopolíticos en la que los países alinean su política internacional con su política comercial, Hallak manifestó que estas relaciones bilaterales “son menos importantes de lo que parecen, ya que si no nos compra un país, nos compra otro”.
A pesar de esta diferencia inicial, ambos coincidieron en que la Argentina debe consolidar sus relaciones comerciales a partir de acuerdos duraderos para salir de los graves problemas de inserción internacional por los que atraviesa.
Estancamiento económico, baja tasa de inversión, macroeconomía inestable, alta inflación, volatilidad de precios relativos, falta de creación de empleo privado, exclusión social y pobreza son las principales características que vislumbra Carciofi en la Argentina. Estas sumadas a las restricciones externas llevan al país a una crisis económica y social recurrente. “Es necesario reorientar la estrategia de desarrollo para estabilizar la economía en el marco de un programa integral. Estos 40 años de democracia muestran con claridad que es necesario resolver los desequilibrios macroeconómicos para alcanzar un sendero de crecimiento, crear empleo privado, reducir la pobreza y, por esta vía, alcanzar una mayor inclusión social”, sostuvo.
Por su parte, Hallak indicó que el norte de la política productiva tiene que ser el desarrollo exportador ya que insertarse en mercados internacionales tracciona los procesos de inversión e innovación generalizados. En este panorama, sostuvo que la Argentina tiene un gran potencial exportador en los sectores agroindustriales, industriales y de servicios, espacios que pueden generar, además, un incremento en el empleo. “La facilitación del comercio, el acceso a mercados, la inteligencia y promoción comercial, la infraestructura de calidad de transporte y de comunicaciones, el financiamiento y la capacitación pueden ser las soluciones para una economía tan cerrada y poco expuesta a la competencia global como la nuestra”, destacó.
Por su parte, Kulfas, ex ministro de Desarrollo Productivo de la Nación y actual docente de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), y López dieron cuenta de la necesidad que tiene la Argentina de adoptar nuevas políticas industriales.
Lopéz indicó que la Argentina necesita políticas de desarrollo productivo para mejorar el clima de negocios, promover exportaciones, atraer inversiones, elevar la productividad de la economía, fomentar el desarrollo sostenible, reducir las disparidades regionales y transformar la estructura productiva.
Kulfas, por su parte, explicó la posibilidad de que emerja en nuestro país una nueva política industrial que ofrecería un futuro promisorio para la producción de energía limpia, como la eólica y solar. “Hay una oportunidad enorme, también, para atraer inversiones que tengan que ver con la electromovilidad y tener una reserva productiva para América del Sur”, destacó. “El problema de la Argentina siempre tiene que ver con el péndulo, es decir, pasar de políticas de aperturas económicas completas, en las que lo interno pierde productividad, a otras en las que las restricciones y el proteccionismo rechazan cualquier tipo de inversión”, sostuvo. “Es necesario tener un esquema con el que se pueda dar una mayor apertura a estos nuevos sistemas de producción, seleccionar los tramos que pueden ser competitivos y apoyarlos en sus capacidad más que en la protección arancelaria”, precisó Kulfas.
En su conclusión, el ex ministro de Desarrollo Productivo indicó que el nuevo escenario político internacional, signado por las tensiones entre Estados Unidos y China, abre oportunidades para países como la Argentina ya que puede aprovecharlas para llevar a cabo negociaciones que lo favorezcan tanto con la nación asiática como con el país del norte de América.
