La Academia Nacional de Ingeniería distinguió a una graduada de la UNTREF
Candela Romero, titulada en Ingeniería Ambiental, ganó el Premio Ingeniero Isidoro Marín a Egresados Sobresalientes.
17-12-2024
Para la graduada en Ingeniería Ambiental Candela Romero, la navidad llegó con anticipación. El inesperado pero merecido Premio Isidoro Marín ya está en sus manos como reconocimiento por su dedicación al estudio durante toda su carrera universitaria. La distinción se materializó en un título, una medalla y un sin fin de aplausos y fue otorgada por la Academia Nacional de Ingeniería.
Como un deportista olímpico que se sube al podio para recibir las medallas que coronan su esfuerzo, Candela levanta los brazos y festeja: es la única alumna de Ingeniería de la UNTREF en ser reconocida este año en una premiación que lleva ya más de tres décadas de vigencia. “Me siento muy contenta y orgullosa de ser parte de las mujeres que estudiamos ingeniería y que tratamos de insertarnos en este ámbito. Espero que en los próximos años seamos muchísimas más”, dijo la egresada. Además señaló que durante este tiempo “aprendí lo que es la disciplina, el esfuerzo, la superación y el hecho de lidiar con la exigencia y la frustración”.
Si bien a lo largo de sus seis años de cursada la flamante ingeniera tuvo que dejar muchas cosas de lado, como reuniones sociales, salidas con amigos los fines de semana o cumpleaños familiares, entiende que este reconocimiento demuestra que “tanto esfuerzo valió la pena”. “Cuando mirás para atrás y ves que eso que dejaste de lado tuvo su recompensa, sentís un gran orgullo”, precisó Candela que se considera una persona con “sensibilidad por la naturaleza”. Recordando abandona, por un momento, el presente y vuelve a cuando era más chica y encuentra allí un posible origen de su amor por la Ingeniería Ambiental: “Mis vacaciones favoritas siempre tuvieron que ver con la naturaleza y con recorrer paisajes. Además, en la escuela mi materia preferida era Ciencias Naturales y ya de más grande Biología”. Fue en 6º año de Secundaria cuando se decidió por Ingeniería Ambiental y por la UNTREF. Según recuerda, la combinación de su preocupación por el ambiente y su sensibilidad por cuidarlo junto al desarrollo de la matemática y la ingeniería dejaron armado un rompecabezas ideal para su formación universitaria.
Sobre la Universidad, Romero solo tiene palabras de agradecimiento que resume así: “la UNTREF fue un gran paso en mi vida”.
Isidoro Marín fue Ingeniero Civil y Profesor Titular de Investigación Operativa en las Facultades de Ingeniería, Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires. Nacido el 7 de febrero de 1921, obtuvo el Premio Konex de Platino de 1993. Los Premios Isidoro Marín se entregan desde ese año y tienen como objetivo honrar a los graduados destacados de las distintas carreras de Ingeniería que se ofrecen en universidades nacionales. Entre los principales requisitos para obtenerlo se encuentran: la calificación sobresaliente –los candidatos deben haber alcanzado un nivel sobresaliente de capacitación científico-técnica-, el promedio de calificaciones debe ser mayor a 8 puntos, la duración de la carrera debe realizarse en un mínimo de cinco años para recibir el título de Ingeniero y haber completado la carrera como alumno o alumna regular en el número de años establecido por la universidad.
El coordinador de Ingeniería Ambiental Julio Sola se acercó a la Academia Nacional de Medicina –institución en la que se entregó el premio- y acompañó a Candela durante la ceremonia. Sola aplaudió orgulloso a su alumna desde su asiento y destacó que este reconocimiento “a nosotros como docentes y a la Universidad, en particular, nos reconforta”.
El jurado responsable de recomendar al Plenario de la Academia la adjudicación de los premios estuvo compuesto por: Patricia Arnera, Raúl Escalante, José Luis Inglese, Osvaldo Postiglioni, y Carlos Brañas.
